Decálogo para unos piés sanos

1 - Como el resto del cuerpo, los pies requieren unos cuidados mínimos diarios. Los básicos son la higiene y una buena hidratación. Realice la higiene diaria de sus pies con agua templada y jabón dermatológico neutro.
2 - Es especialmente importante el secado, con especial atención entre los dedos, utilizando una toalla e incluso secadores de aire templado entre los dedos. La humedad favorece la aparición de hongos.
3 - Mantenga la piel suave e hidratada mediante cremas específicas a base de urea, evitando tener los pies demasiado secos o húmedos.
4 - Corte sus uñas con sumo cuidado, rectas, para que no se encarnen en los laterales. Lime posteriormente la esquinas y bordes con lima de cartón, semanalmente o más a menudo si es necesario.
5 - Las causas de las durezas, callosidades y ampollas es siempre la misma; el roce reiterado. Se debe por tanto evitar usar zapatos estrechos o demasiado puntiagudos. Los zapatos de tacón excesivamente alto, más de 4 cm, hacen que todo el cuerpo descanse sobre la parte delantera de la planta, favoreciendo la aparición de durezas, dolores, deformidades, artrosis...
6 - Evite utilizar agentes irritantes o potencialmente lesivos tales como cuchillas, piedra pómez, alcohol, yodo, callicidas, etc. Los apósitos y esparadrapos que contacten con la piel deben ser hipoalergénicos.
7 - Evite andar descalzo por vestuarios, piscinas, duchas públicas o moquetas, para prevenir las micosis o infecciones cutáneas por hongos. Estas infecciones son muy frecuentes, pueden contaminar la uñas, y trasmitirse a nuestros convivientes. No intercambie ni comparta calcetines ni calzado con otras personas.
8 - Bienestar: Siempre que le sea posible, conviene tumbarse o sentarse con los pies en alto para favorecer la circulación sanguínea de retorno. Es muy beneficioso además para estimular la circulación alternar baños de 5 minutos de agua caliente y 1 de fría. Caminar descalzo por la playa, césped o superficies limpias y no hirientes supone un masaje muy saludable.
9 - Realice ejercicio, especialmente caminar. No fume. Cuide su dieta.
10 - VISITE A SU PODÓLOGO PERIÓDICAMENTE PARA VALORAR DE SUS PIÉS. ANTE CUALQUIER SIGNO DE ALARMA, ESPECIALMETE SI SUFRE DIABETES, TRASTORNOS VASCULARES, ARTROSIS... CONSULTE A SU PODÓLOGO, ÉL ES EL ESPECIALISTA QUE MEJOR PUEDE AYUDARLE.